Opinión - Torre del Mar 04 de diciembre de 2022
Hoy, 4 de diciembre,
Andalucía celebra el día de su bandera. Para
José Pino es el momento de acordarse de ella. Hoy sí, que es postureo.
Para este concejal veleño, que
enarbola Andalucía un día al año, toca eso,
salir a las redes y acodarse de Caparros. Además, lo hace apuntando al
PSOE y GIPMTM, que este 4 de diciembre no son tan andaluces como lo es él.
Mañana es lunes y será otro día. Porque tocará seguir
bailando el agua que marca Delgado Bonilla en Vélez; lo que viene siendo
el PP rancio al que Pino se acoge a ver si ve la luz en el oscuro andalucismo de las siglas de su partido y que ni él mismo se cree.
Porque Pino quiere que todo sea para él.
Es Dios en la tierra y necesita alimentar su ego. Ni
Segura, ni los de la carpeta que van casa por casa a ver si con
'juegos de palabras' consiguen la firma deseada. Esos tampoco les vale. Porque él es
el nuevo 'gentlemen' de la política de trileros. ¿Dónde está mis siglas, aquí o aquí?
¿A dónde nos lleva tanta chabacanería? Seguro que
a ningún sitio productivo. Porque
el laberinto de este señor es insondable. Ya no sabe si ser o estar dentro de una bandera de Andalucía donde no cabe él solo, aunque lo pretenda.
Ahora
la tiene tomada con Torre del Mar, pero ya solo con los vecinos del centro, que se lo llevan todo. También con los turistas, que sacan tajada de los vecinos del núcleo de Vélez. Como ven,
un disparate tras otro.
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